por Patricia Beltramino
En un país tan futbolero como el nuestro, nos pese a quien nos pese, existe este popular dicho. Con esta frase simpatizantes o jugadores de un equipo acusan al árbitro de haber tomado la decisión de marcarles una falta por la presión del rival. Dicho así carece de toda la magia, el carisma y el folklore de la tribuna; pero si existe un solo ser en este territorio que no comparta los códigos de la cancha, vale la definición.Y si hay un país con poco fútbol, ese es Estados Unidos. Allí aún se aguarda la certificación oficial del recuento de votos por cada estado, pero mientras tanto… ¡la cobró la gente!
En una elección muy reñida, atravesada por un contexto de pandemia y distanciamiento, el pasado 3 de noviembre se desarrollaron las elecciones en los Estados Unidos. Las coberturas previas del suceso prometían disputa, y no defraudaron. Pasaron las campañas, los debates de los candidatos y candidata, los votos anticipados por correo, los presenciales en los tradicionales -y no tanto- centros electorales. El sábado 7, y tras una proyección a favor de Joe Biden en el estado de Pensilvania, los medios anunciaron su triunfo en lo que denominaron “una victoria poco común sobre un presidente en ejercicio”. El contagio fue imposible de contener. Cadenas y portales del mundo se plegaron a la noticia anunciando ganador al candidato demócrata mientras Donald Trump amenazaba desde sus redes que las elecciones no estaban cerradas.
Y técnicamente es así. Los estados federales tienen plazo hasta el 8 de diciembre para emitir los conteos oficiales y definitivos, el 14 de diciembre los votos deben llegar al congreso y recién el 6 de enero de 2021 se anunciará de forma oficial al 46° Presidente de los Estados Unidos. Pero el pasado lunes 10 y tras golpear muchas puertas, finalmente consiguió que el fiscal general William Barr instruya la investigación en aquellos casos en que exista una denuncia con sustento.
Pero mientras la batalla del actual mandatario se juega un último intento por esta vía, es cada vez más reducido el bastión que defiende la cruzada.
En la platea
Y pese a que hay otras autoridades internacionales que aún no se han manifestado al respecto o lo han hecho sólo para decir que esperarán resultados oficiales, como Vladimir Putin, Andrés Manuel López Obrador y Jair Bolsonaro, por mencionar algunos; todas estas expresiones se han mantenido en el marco de la formalidad y la cordialidad.
En la popular
Este es un sector conocido por ser menos protocolar, más agresivo y menos respetuoso de las formas. Pero también donde se dan las mayores ocurrencias, el color y la chispa. Trump y Biden llevaron su campaña a las tribunas, y concluidos los comicios, llegan las respuestas.
Por este lado muchos actores, cantantes, artistas y referentes se han manifestado por la victoria de Joe Biden y Kamala Harris, pero principalmente por la derrota del actual mandatario.
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| Posteo del actor Woddy Harrelson en Instagram |
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| Obra del grafitero TvBoy en las calles de Barcelona |
Y aunque es muy difícil que se revierta, por la entereza del sistema institucional del país del norte, esperamos que eso no suceda. Porque más allá de las diferencias políticas e ideológicas que podamos tener con el actual presidente Trump, una vuelta atrás devastaría la confianza del pueblo norteamericano en el poder de su voto.
El partido terminó, los equipos se metieron a los vestuarios, las transmisiones finalizaron, se van apagando las luces del estadio y solo queda el capitán de camiseta azul discutiendo con el árbitro... una diferencia de 3 millones de goles.
Si fuera una carrera de autos Trump, te diría que la seguimos en la técnica, pero lamentablemente para ambos, acá pesa el fútbol y a este resultado, ¡lo cobró la gente!




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